La importancia de un título
¿Te has cuestionado acerca de la importancia de un título? Para algunos escritores, este es un elemento que llega al final de cada producto. Sin embargo, yo tengo una percepción totalmente distinta de ellos, ya que siento que tiene mayor peso de lo que se cree.
Es una discusión interesante, debido a que existen muchas opiniones con respecto a este elemento dentro de la literatura. Por lo que, me gustaría desarrollar un poco más este tema.
El título: Un nombre que lo puede definir todo
Los títulos no solo consiguen dar un peso importante a las obras literarias, puesto que su trascendencia puede alcanzar varios niveles. Pasando por el cine, incluso en la televisión o en la música. Cada título es un nombre que consigue aclarar el sentido, la esencia y el cometido de cada producto.
Para mí, este logra darle forma a lo que voy a hacer, consigue marcar las líneas y la naturaleza de lo que estoy escribiendo. A tal punto, que me es imposible percibir que algo es real si no tiene un título.
Podría tener una gran cantidad de palabras, pero si no le he dado un nombre a eso que estoy haciendo, es como si no existiera, incluso si luego termino cambiándolo. Claro que, no todos pensamos de la misma forma, y tengo constancia de que otros escritores consideran que el título debe llegar después, cuando conocen en totalidad lo que están creando.
Para mí es todo lo contrario, necesito definir con un nombre lo que mi obra va a ser, tanto si se trata de un cuento corto, como de un artículo o una nota.
El título es la posibilidad de darle un significado diferente al libro
La idea de un texto puede estar clara desde un principio, pero luego te encuentras con que el título nos da una perspectiva distinta a lo que hemos leído o escrito. Dicho esto, un título tiene el poder de cambiar el significado de lo que acabamos de leer o producir.
En el caso de los escritores que lo colocan al final, no consiguen definir o darle un significado a lo que han originado hasta ese preciso momento. Aunque de preferencia, yo busco dar un título al principio, pero puedo entender la necesidad de no nombrar hasta el final.
Sin embargo, no podemos dejar escapar el punto, y este es el poder o la importancia que tiene un título para la historia. Se trata de la invitación, la tentativa, la presentación de nuestra historia para los lectores.
Es ese conjunto de palabras que esconde más de lo que dice, que nos hace querer explorar aquello que se oculta detrás de la portada. Si un título no es lo suficientemente poderoso, no despertará la tentación de las personas por consumir lo que hay en esa historia.
No obstante, tampoco debemos abusar de la influencia que tienen los títulos en nuestras obras, y con esto me refiero a intentar engañar al lector con ellos.
Por ello, darle un nombre se convierte en una tarea compleja cuando entendemos la importancia de los mismos en lo que escribimos. Lo que, por supuesto, refuerza mi creencia de que los títulos son más que solo eso.